DESCUBRIENDO COLOMBIA/ITINERARIO POR EL LAGO DE TOTA

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ITINERARIO POR EL LAGO DE TOTA

Con el fin de facilitar tu viaje y ahorrarte tiempo, aquí te dejo el itinerario que hemos realizado nosotros en familia. Como referencia, también te indico los restaurantes que más nos han gustado. En este viaje quedamos en el mismo hotel todo el tiempo, desde donde realizamos las salidas cada día. Nosotros hicimos el viaje en época de Navidad, haré referencia a los pueblos, que hay que visitar por su alumbrado navideño.

 

Día 1. Bogotá – Puente de Boyaca – Pueblito Boyacense

Salimos temprano de Bogotá. En el camino una buena opción para desayunar es el restaurante Carajito (km. 41 Autopista Norte Sesquilé-Guatavita). La comida es deliciosa y hay un parque exterior con columpios y toboganes gigantes, tanto para los niños como los adultos.

Nuestra siguiente parada es el Puente de Boyacá, a 110 km de  Bogotá y 14 km de Tunja. El sitio conmemora la histórica victoria de los independentistas el 7 de agosto de 1819, conocida como batalla de Boyacá, la cual concedió la independencia a Colombia. El pequeño puente fue construido a principios del siglo XVIII y declarado como Monumento Nacional de la independencia en 1920.

Llegamos a nuestro hotel, donde almorzamos. Nosotros nos quedamos en un Hotel en Punta Larga en un sitio bonito, pero al lado de la carretera. El hotel ofrecía muy buen servicio, con desayuno y un punto de salida fácil cada día a los diferentes destinos.

Por la tarde visitamos el Pueblito Boyacense en Duitama, donde se encuentran las réplicas de los pueblos más lindos de Boyacá, como: Villa de Leyva, Tibasosa, Tenza, Sáchica, El Cocuy, Ráquira y Monguí. Aquí se encuentran hoteles, hostales, restaurantes y tiendas típicas para la comercialización de artesanías, entre otros. En época de Navidad llama la atención la iluminación. Si nuestra visita es en Diciembre, podemos seguir y hacer el circuito Santa Rosa de Viterbo – Tobasia – Floresta – Busbanza para ver su iluminación navideña y las pesebres.

Día 2. Lago de Tota – Aquitania

Después del desayuno viajamos a Lago de Tota. El lago está ubicado a una altura de 3015 metros, después del Titicaca es el segundo lago navegable a mayor altitud de América del Sur.  El lago tiene un área aproximada de 60 kilómetros cuadrados y una profundidad máxima de 61 metros. Esto convierte al lago de Tota en el embalse de agua dulce natural más grande de Colombia. La temperatura en las cercanías del lago presenta fuertes fluctuaciones que pueden variar entre una mínima de 0 °C y una máxima de 12 °C. Durante nuestra visita hacía mucho viento y frío. En la parte suroccidental del lago, llegando desde la dirección del pueblo de Tota, existe una playa natural de arena fina, llamada Playa Blanca. El sitio es frecuentado por turistas y hay un parqueadero de pago que a la vez también sirve para entrar a la playa. Aquí salen barquitos para hacer un recorrido por el lago.

De aquí seguimos a Aquitania, donde almorzamos y subimos con carro al mirador desde dónde se pueden apreciar las vistas del lago. Nos gustó mucho el restaurante Pueblito Viejito en la plaza principal del pueblo, al lado de la iglesia.

Como nosotros visitamos el sitio en Diciembre, a la vuelta bordeamos el lago y seguimos a Corrales, famoso por su iluminación navideña. En otro época del año les recomiendo las siguientes opciones:

  • Tomar onces en Tibasosa: famosa por sus postres de feijoa, son muy ricos!
  • Iza: pasar la tarde en el balneario del Hotel Batán
  • Sogamoso: visitar el  Museo Arqueológico y Templo del Sol, donde se encuentran piezas  precolombinas de la cultura muisca y una réplica del Templo del Sol.

Día 3. Nobsa – Monguí – Tibasosa

Nuestra primera parada hoy es Nobsa, pueblo de artesanías, donde visitamos las tiendas y compramos prendas de lana. En época de Navidad en la plaza principal del pueblo encontramos un pesebre con muchos detalles,  tallados de madera y con figuras que se mueven. 

De Nobsa seguimos a Monguí, un pueblo con casitas coloniales blancas y calles empedradas. (Nobsa – Monguí 30 minutos de viaje) Uno de los sitios que más me ha gustado en Colombia. El pueblo también forma parte de Red de Pueblos Patrimonio de Colombia. Paseamos por sus calles, visitamos la iglesia y el puente de Calicanto del siglo XVII,  que fue construido para facilitar el tránsito de los pobladores sobre el río El Morro. Monguí también es famoso por su producción de balones. Desde 1930, un centenar de familias de Monguí han traspasado la tradición de coser y vulcanizar balones de cuero, dueños de una técnica artesanal que ha llevado sus esféricos a la liga de fútbol colombiano y ahora exporta un promedio anual de 300.000 a los mercados de Venezuela y Centroamérica. (fuente: Wikipedia)

Almorzamos en Monguí y por la tarde visitamos a Tibasosa, famosa por sus postres de feijoa. Otra opción es seguir hasta Paipa conocida por sus aguas termales y pasar la tarde en un balneario.

Si tenemos tiempo, podemos alargar nuestro viaje y pasar una noche en Monguí con el objetivo de visitar el Páramo de Ocetá el día siguiente. Nosotros hemos vuelto en otra ocasión para realizar la caminata que ida y vuelta dura unas 6 horas. El recorrido debe hacerse con guía. Aquí pueden leer sobre la excursión al Páramo de Ocetá.

Día 4. Museo Bolívar Hacienda del Salitre – Monumento Pantano de Vargas – Tunja – Vuelta a Bogotá

Antes de iniciar nuestra vuelta a Bogotá, visitamos la Hacienda de Salitre que fue declarado Monumento Nacional. La Hacienda sirvió como cuartel general y hospital del ejército libertador de  Simón Bolívar, después de la Batalla del Pantano de Vargas, el 25 de julio de 1819 y donde pernoctó El Libertador Simón Bolivár del 3 al 4 de agosto de 1819.

El Monumento de Pantano de Vargas es un homenaje a la batalla del Pantano de Vargas ocurrida el 25 de julio de 1819. Se le considera el monumento más grande de Colombia y en él se destaca la carga de los 14 lanceros al mando del Coronel Juan José Rondón. El monumento de 33 m de alto se erigió con motivo del sesquicentenario (150 años) de la independencia en 1969. La parte elaborada en concreto tiene 36 escalones en memoria a los 36 años que Simón Bolívar tenía el día de la batalla. Alrededor del monumento hay guías que por una propina nos explicarán la historia del monumento.

Una opción para almorzar que nos gustó es el restaurante del Club Náutico en Paipa, al lado del lago Sochagota. O podemos seguir hasta Tunja, dónde hacemos una parada en su plaza principal, considerado como la segunda más grande después de la plaza de Villa de Leyva.